La acumulación de injusticias por parte de la oligarquía y de un gobierno que se sirvió del pueblo que tanto le dio y que no consideró en devolverle nada, dio como resultado la lucha armada, donde la mayoría de los mexicanos participaron para exigir un poco de libertad y de justicia, donde después de tantos años de lucha obtuvo como resultado una Constitución que poco les favoreció, pero que hoy en día tiene como bandera una causa que tal vez algún día vuelva a surgir.
Distintos catedráticos, escritores, políticos, abogados y antropólogos consultados dejan en claro que dicha revuelta dejó mucho, sin embargo, lo que permite el estudio de estos compendios es la muestra de lo que no todos se atreven a reconocer, que hasta esta era todavía se vislumbran los estragos del desequilibrio social que persiste en la sociedad de México.
Un claro ejemplo es Cancún, un lugar paradisiaco, inalcanzable para muchos que lo visitan, sus costosos y grandes hoteles, que se encuentran a la orilla del mar, dejan ver la terrible explotación de los recursos naturales, y también del hombre, ya que el yugo es visto con normalidad, las paradas de autobuses dejan ver esta situación en la que la mayoría de la población sube para ir a trabajar a los hoteles o lugares turísticos que traían hasta el 2019, miles de turistas de toda parte del mundo.
Hoy en día, derivado de la pandemia, se ven desolados dichos lugares, y como en gran parte del país, el desempleo y la situación de desigualdad se refleja en que no todos se pueden dar el lujo de quedarse en casa para cumplir con el confinamiento, propuesto por las autoridades para disminuir las tazas de contagio.
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